Hípica el Trébol en Málaga, en la localidad de Benajarafe, ofrece tener los caballos en paddocks  en una finca ecológica. Todos ellos van equipados de vallas de madera y pastor eléctrico, cobertizos, bebederos automáticos, algunos con árboles para el verano caluroso y una limpieza diaria de lunes a viernes para mantener una buena higiene. Disponemos de varios tamaños de cercas, para uno o dos caballos, agrupadas y abiertas a que todos los caballos se vean.

Los caballos son animales de manada, necesitan contacto social y movimiento.  La vida en paddock les permite ver a sus compañeros e interactuar con ellos. De este modo los días se les hacen menos monótonos y tienen más estímulos, se sienten más relajados y no suelen desarrollar vicios de cuadra. Al estar en movimiento también se reduce el riesgo de padecer cólicos. Para los caballos con artrosis la vida en paddock les viene bien también al mantener las articulaciones en movimiento.  También si se plantea dejar descalzo a su caballo, la vida en paddock es indispensable para lograr fortalecer el casco del caballo y que se vaya renovando.

Los caballos de la escuela están descalzos y viven en manada en un paddock grande. Cuando se elige ese modo de manejo de sus caballos hay que observarlos muy bien y entender la jerarquía que van estableciendo y controlar que cada uno pueda comer tranquilamente y que se lleven bien. Hemos incluido el uso de redes para el heno, para se vayan entreteniendo y coman más despacio. En nuestra manada cada vez que se incluye un nuevo miembro se hace de manera progresiva, poniendo al caballo primero durante un tiempo en un cercado dentro del paddock de la manada, y posteriormente se mezcla con la manada. La primera semana suele ser bastante movida pero luego se establece una nueva jerarquía y se equilibra la situación. Para limitar los daños es fundamental que no lleven herraduras, al menos en los pies. Después de ese periodo de adaptación, de una a dos semanas, se puede valorar si el equilibrio ha vuelto a la manada y si el caballo nuevo ha encontrado su lugar.

Son muchas las ventajas de los caballos en paddocks para el jinete: al estar en movimiento, y no en una cuadra, su caballo está más relajado e equilibrado mentalmente, lo que lo hace más dócil y dispuesto a la hora de trabajar. También, si no dispone del tiempo suficiente para sacar a su caballo todos los días del box, para ejercitarlo, no se sentirá tan culpable al pensar que está encerrado en un 3x3m.  Conservarán mejor su musculatura, pero en el caso de tener que interrumpir su entrenamiento lo agradecerán mucho. En caso de recuperación de una lesión (según la lesión) o enfermedad (caballos con tendencias a los Cólicos) es una solución ideal.

En cuanto a la suciedad del caballo, obviamente en invierno con la lluvia se formará barro, pero a ellos les encanta revolcarse, ¡así que armarse de una buena rasqueta y algo más de tiempo y está solucionado! En caso de humedad en el suelo, habrá que controlar el estado de los cascos. Tenemos la suerte de gozar de un buen clima en la costa del sol así que serán pocos días.

Si decide cambiar su caballo de un box a un paddock, la mejor época es a partir de la primavera y en verano. El primer invierno, si es necesario en caso de lluvias extremas o frío, se le puede poner una manta. Los caballos que están a la intemperie se protegen sacando más pelo en invierno y suele ser suficiente. Además, para los días de frío se les da un suplemento de heno.  En nuestra zona, el clima es muy suave y los caballos no suelen pasar frio. El verano sin embargo es más largo y el calor puede afectarles, pero al disponer de agua a voluntad, árboles y cobertizos, se pueden refugiar del sol.

Ven a visitarnos o pídenos información, muchas gracias.